AL COMENZAR EL AÑO 2025

Cuando finaliza un año y comienza otro, con él renace la esperanzas de un "tiempo mejor". Por ello, muchas personas - incluyendo a aquellos que se autodefinen como creyentes en Dios - caen en una serie de supersticiones y rituales sin sentido, como por ejemplo; esperar la medianoche con una maleta (con la esperanza de poder viajar) o le dan el primer abrazo a alguien del sexo opuesto, con el propósito de encontrar pareja ese año. Otros más creativos e ingenuos, piensan que comiendo lentejas o uvas, será un año exitoso. Y ni hablar de las damas que se ponen ropa interior de colores; rojo, amarillo, negro o verde, dependiendo del país, buscando atraer lo que desean. ¿Acaso no es más sabio comenzar un nuevo año, poniendo la esperanza en Dios y Su Palabra que no cambia? ¿Acaso no es más seguro creer las promesas de nuestro Padre que no pueden ser quebrantadas, y vivir este nuevo tiempo de acuerdo a ellas? Qué nos dice el Señor para este 2025 que recién comienza: "Sepan que...