LOS MAGOS DEL ORIENTE

 FALSO: La Biblia NO dice que eran reyes. No dice que era tres y tampoco menciona nombre alguno. 

En el relato del Evangelio de Mateo (Mateo 2:1-12), los magos son descritos simplemente como "sabios" o "magos" (del griego mágoi) provenientes del oriente,  probablemente astrónomos - porque estudiaban las estrellas, y por eso venían seguían siguiendo una en particular (Mt.2:2) - y no se especifica su número, nombres ni estatus como reyes. 

Examinemos la evolución de esta tradición NO bíblica: 

Desde el siglo III, se comenzó a hablar de los "tres magos", debido a los regalos oro, incienso y mirra (Mt.3:11).

En el siglo IV, los "tres magos" se convierten en "reyes magos", por la influencia de lecturas alegóricas del Antiguo Testamento, tales como: Salmo 72:10-11: "Los reyes de Tarsis y de las costas traerán presentes; los reyes de Sabá y de Seba ofrecerán dones". Isaías 60:1-6: Describe caravanas de camellos y regalos de oro e incienso en una visión mesiánica. Estas profecías se asociaron con el relato de los magos, interpretándolos como reyes que rendían homenaje al Mesías.

En el siglo V, el concepto de los magos como reyes quedó firmemente establecido en la religiosidad y el arte cristiano occidental. 

En el siglo VI, aparecen por primera vez los nombres  Gaspar, Melchor y Baltasar en un manuscrito griego conocido como el Excerpta latina barbari, y su difusión se consolidó en Europa Occidental a través de la Historia de los Tres Reyes Magos escrita por el monje Beda el Venerable en el siglo VIII.

En la Edad Media, se les atribuyó simbolismo adicional, como representación de las tres razas conocidas (europea, asiática y africana), enfatizando la universalidad del mensaje cristiano. Es así que Melchor se convirtió en un anciano de piel blanca, que traía el oro. Gaspar, ahora era un joven asiático que entregaba el incienso y Baltasar era un rey africano que traía la mirra.

Cabe señalar que aquel tiempo, debido a la distancia y a los tesoros que llevaban, se viajaba en caravanas compuestas de al menos una quincena de personas y camellos, jamás tres personas solitarias.

En resumen, el concepto de "tres reyes magos" y sus nombres no surge de la Biblia, sino de una combinación de interpretación simbólica, influencias culturales y religiosidad popular, que nada tienen que ver con los evangelios. Es triste ver lo fuerte de esta tradición no bíblica, visible en la mayoría de las representaciones de Navidad en comunidades cristianas, donde aparecen "los tres reyes magos".