¿POR QUÉ SIEMPRE LOS NIÑOS?

 


¿Se ha dado cuenta que en Halloween, el objetivo son los niños? Esa noche se los disfraza de brujos, diablos con cuernos, vampiros, muertos vivientes y todo aquello que es macabro, oculto y demoniaco, con la excusa que sólo es una noche para "pasarla bien", donde inocentemente van por las casas pidiendo dulces.

Los padres debieran saber que el trasfondo de esa noche no es de diversión, sino que es cruenta y satanista, que escondida bajo el manto de la diversión, busca iniciar a los niños en el mundo de lo oculto, con el apoyo de la ignorancia espiritual de sus padres.

Con el tiempo, esos mismos padres se quejarán que sus hijos no quieren nada con Dios, pues encuentran más entretenido el mundo oscuro de las películas de terror o abiertamente satánicas. Y eso comenzó una "inocente noche de Halloween".

EL OBJETIVO: LOS NIÑOS

Es interesante darse cuenta que siempre los niños son el centro, donde el objetivo último es apartarlos de Dios. Observe lo siguiente: La noche de Halloween los padres acercan a sus hijos a lo demoniaco, pero de manera "entretenida". En Navidad, muchos pequeños no tienen idea que esa noche gloriosa nació Jesús el Salvador, pero conocen al Viejo Pascuero, a Rudolf el Reno, al Grinch, y a un sin número de personajes que "inocentemente" los apartan de Jesús. En Semana Santa, tampoco saben que ese domingo el Señor resucitó de los muertos, pero saben de un conejo que pone huevos de chocolate.

La maldad en este mundo está cada día más desatada, y los niños son el objetivo. De los padres depende el criarlo bien y no en la corriente de esta sociedad, donde la maldad y el ateísmo será peor cada día. Hoy, lamentablemente, estamos viendo como las palabras de Isaías 5:20 son una triste realidad: "Ay de lo que a lo malo dicen bueno, y a los bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo". 

¡Es tiempo de despertar!.


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