DIOS BUSCA CAMBIARNOS A NOSOTROS
A veces le pedimos tanto a Dios que cambie nuestras circunstancias, que quite el dolor, que haga milagros en nuestras vidas, y si no contesta a nuestra plegaria, nos enojamos con Él y nos alejamos, sin entender que si nuestro Padre está permitiendo alguna situación inconfortable, es para cambiarnos a nosotros.
Un excelente ejemplo de esta verdad, es la historia de José, relatada en el libro de Génesis desde el capítulo 37 al 50. Allí se nos muestra un joven que fue inmerecidamente vendido como esclavos por sus hermanos, acusado injustamente por la esposa de Potifar, y puesto en la cárcel por varios años, por un delito que no cometió. Lo curioso es que no sólo Dios permitió todas esas circunstancias dolorosas, sino que la Biblia dice que durante todo ese tiempo "Dios estaba con José" (Génesis 39:2,21 y 23).
¿Por qué Dios consintió todo eso y no cambió las circunstancias de José? Porque lo estaba cambiando a él, estaba preparando su carácter y transformándolo en un hombre sabio y fuerte para salvar a su pueblo, cuando viniera la hambruna a Egipto. Cuando llegó el periodo de las "vacas flacas", José estaba preparado por Dios, para llegar a ser un líder tan importante como el mismo faraón, y así salvar a Egipto y a su pueblo.
Por lo tanto, si está viviendo tiempos duros, no le pida a Dios que los elimine, sino más bien confié en que Dios le está preparando para un futuro que sólo Él conoce. ¡Confíe en Dios, pues Él está con usted!
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