EL DOLOR ES INEVITABLE, EL SUFRIMIENTO ES OPCIONAL


Estamos de acuerdo que mientras estemos en este mundo, el dolor será inevitable, pero el sufrimiento será nuestra elección. Permítame explicarlo mejor: imagine que a alguien le ocurrió algo muy doloroso hace años atrás, pero al día de hoy, sigue sufriendo por ese evento. Eso significa que esa persona, no sólo no aprendió nada, sino que ha elegido vivir en el sufrimiento, perpetuando el dolor y la falta de perdón. 

Otras en cambio, están en la misma situación, pero deciden ocultar su sufrimiento, y deciden vivir en "piloto automático", pero siguen "tropezando con la misma piedra" una y otra vez, y se preguntan ¿Por qué me pasa esto a mí?, sin entender que el dolor ha sido un llamado de atención que Dios ha permitido para hablarle, de manera que pueda conocerle realmente, sin religiosidad. 

Todo esto nos sucede, porque no hemos entendido que el dolor - parafraseando a C.S. Lewis - "es el megáfono que usa Dios para hablarnos", y en un proceso de transformación interior guiarnos a ser sanados, restaurados y comencemos a vivir una vida con sentido. 

El Señor Jesús dijo claramente: "En el mundo tendrán aflicción, pero confíen, yo he vencido al mundo" (Juan 16:33), buscando que entendiéramos que el dolor que hallaremos en este mundo, es un maestro que nos guía hacia Él, y que conociéndole aprendamos a vivir victoriosamente en esta tierra llena de aflicción.

El poeta francés Jean Baptiste Racine decía: "El dolor silencioso es el más funesto", por tanto, si está en la situación que describo y no sabe que hacer, le invito a ponerse en contacto conmigo o lea mi libro "Abrazando el dolor" que se encuentra en Amazon.com, donde comparto mi experiencia de vida, mediante la cual Dios me enseño a abrazar el dolor y verlo como un maestro, no como un verdugo.


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