EL TELEFONO QUE PENSABA QUE NO NECESITABA CARGADOR
Había una vez un celular muy exitoso e inteligente, tanto así, que en la comarca le llamaban el "Smartphone". Tenía una pantalla increíble, poseía la cámara gran angular con más megapíxeles que cualquier otro, y que decir de su potente procesador y de su memoria RAM, además de una batería gigante con gran autonomía. Smartphone, era un exitoso "última generación" y estaba orgulloso de ello.
Un día se encuentra con "Nokia", el anciano sabio del pueblo, quien lo saluda cortésmente y se da el siguiente diálogo: "Smart, veo que te va muy bien, y que eres muy popular. Por supuesto abuelo - respondió Smart - soy el mejor del condado sin esforzarme mucho, soy muy bendecido. Me alegro mucho por ti, querido Smart, pero no me preocupa que no uses el cargador -dijo el abuelo Nokia - ¿Cargador? - dijo en tono irónico Smart - abuelo, yo no necesito el cargador, lo tengo todo, velocidad, resolución, capacidad de almacenamiento, etc. Ya te dije, soy bendecido, no me molestes más - y se marchó, sin siquiera oír cuando Nokia le dijo - por favor, úsalo"
No pasó mucho tiempo, y un día, el orgulloso Smartphone, no pudo despertar, se había ido a negro, su gran batería se había descargado por completo y nunca se dio cuenta, pues nunca uso el cargador.
REFLEXIÓN
A veces nos comportamos como ese smartphone, nos va tan bien en la vida, que pensamos que no necesitamos acercarnos a Dios. A lo más, en algún momento de apremio, balbuceamos alguna oración, pero vivimos como ese celular, sin darle importancia y sin usar el "cargador" para conectarnos habitualmente a Él, sin entender, que sin duda llegará el momento en que la "batería" se agotará y nos hallaremos absolutamente solos y lejos de Dios.
El Señor Jesús dijo; "Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. 2 Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto....4 Permanezcan en mí, y yo en ustedes. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco ustedes, si no permanecen en mí.5 Yo soy la vid, ustedes los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada pueden hacer". (Juan 15:1,2,4,5)
Una vida fructífera y de realización, sólo puede vivirse conectado al Señor. No obstante, a veces pensamos que se puede vivir "separado de Jesús", pues de todas maneras las cosas nos van saliendo bien y estamos orgullosos de nuestra capacidad. Sin entender, siguiendo el relato del Smartphone, que simplemente estamos usando los recursos de la "batería" o abusando de la misericordia del Padre. Por tanto, es preciso entender que si el Señor dijo; "separados de mí, nada pueden hacer", es porque así es, y quien viva "separado" del Él, va a experimentar esa dolorosa verdad, en algún momento de su vida.
Por tanto, ¿para que abusar de su batería si puede usar su "cargador" todos los días?. Conéctese a la Vid Verdadera, pues esa es la única manera de dar fruto y que ese fruto permanezca.
Pero tenga cuidado, pues así como existe la Verdadera Vid, también existe la falsa, que busca hacerle creer que la conexión, consiste en hacer o asistir a muchas actividades religiosas, porque esa es la muestra clara de la estrecha relación con Jesús, pero eso no es así. De hecho, se puede estar tan ocupado conectado a la falsa vid, haciendo tantas cosas, supuestamente para Jesús, cuando en realidad nada de eso, le ha pedido hacer. Y el engaño es tal, que por estar tan ocupado, no tiene tiempo para estar con Jesús. Por eso Él nos advirtió claramente;
22 Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? 23 Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad. (Mateo 7:22,23)
No se conoce a Jesús, ni se puede dar frutos espirituales siendo un activista religioso, sino siendo verdaderos adoradores, reales discípulos que aprenden a conocerlo, amarlo, obedecerlo, negándose a sí mismo cada día, tomando la cruz y crucificando el ego. Sólo es posible conectarse a la Vid Verdadera, pasando tiempo en lo secreto con el Padre, viviendo en amor y no en temor y decidiendo cada día, vivir una vida cristocéntrica y no egocéntrica, de manera de experimentar una verdadera transformación interior.
No seamos como el smartphone y usemos el cargador cada día, pues "separados de la Vid Verdadera, nada podemos hacer".
c.a.cristianos.anonimos@gmail.com
Sí no me conecto a la VID VERDADERA cada día muero . Gracias Ale por recordarnos esto que está en las escrituras , esta enseñanza debe ser en mí como el aire que respiro .
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